Inmersos en un escenario en el que la sostenibilidad se ha consolidado como una de las grandes preocupaciones a nivel social, son muchas las iniciativas y proyectos que surgen con el objetivo de alcanzar un desarrollo sostenible controlado. En todos ellos existe un donimador común a partir de los cuales se vertebra la actividad: la tecnología.
La correcta aplicación de la misma se convierte en un factor fundamental para el cumplimiento de todos los Objetivos de Desarrollo Sostenible impulsados por las Naciones Unidas. Así como para la consecución de los diferentes retos existentes de acuerdo a la actividad de los diferentes países que apoyan estas iniciativas.
Hacia nuevos modelos de financiación
La tecnología ha invadido multitud de esferas de nuestro día a día. Entre ellas, la manera en cómo interactuamos con la economía. Lejos han quedado las plataformas de financiación tradicionales, así como las entidades bancarias y el resto de agentes presentes en la estrategia bancaria tradicional.
La irrupción de las fintech, basadas en el uso de la tecnología como uno de sus principales pilares, cambió por completo la percepción que tenemos de la misma. En lo referente a la financiación, las reglas del juego también han cambiado de manera considerable. Durante los últimos años han ido apareciendo diferentes plataformas de crowdsourcing y de espacios de financiación socialmente responsables. Añadiendo nuevas perspectivas a unas vías de acceso ya de por sí caducas que necesitaban de una reformulación.
La financiación será esencial para desarrollar nuevas plataformas energéticas renovables. Así como estructuras sostenibles. Cumpliendo con los Los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones(...)