Los diferentes procesos de digitalización en los que nos encontramos sumergidos, unido al avance de la tecnología y la innovación que se desprende de ésta, ha provocado que el marketing digital se encuentre en un constante estado de reinvención. Especialmente en la vertiente del marketing que se encarga del retail, caracterizada por el amplio dinamismo que la caracteriza.
Como consecuencia de la alta competencia en la que se encuentra sumergida esta disciplina, el marketing se ha visto en la obligación de incorporar nuevos paradigmas. Hasta satisfacer todas las demandas existentes en torno a este ámbito. El escenario actual obliga a entender el proceso de compra como una transición formada por diferentes etapas que se integran y complementan entre sí.
Las 4 R’s del Retail Marketing nacen con el objetivo de ofrecer al cliente la mejor experiencia de usuario posible. Invitándole a volver a nuestro negocio cada vez que tenga una nueva necesidad.
(R)elación con el cliente
Establecer una relación afectiva con nuestro cliente es fundamental. Ocupando un lugar clave para intensificar el nexo de unión entre nuestro negocio y nuestra comunidad. Las 4 R’s del marketing mencionan la importancia de crear una estrategia que ayude a retener a nuestros clientes. Para ello, se basa tanto en la satisfacción como en el valor añadido.
Conocer a nuestros clientes, captar sus necesidades y ofrecer soluciones que sean de su interés es clave para rediseñar su experiencia de compra y hacerla única.
En un entorno marcado por alta competitividad, el marketing de contenidos se ha consolidado como una de las estrategias más eficientes para intensificar esta relación.
(R)elevancia
Cuando diseñamos una estrategia de promoción de un producto, el cliente debe sentirse protagonista de la misma. Cada producto debe responder a una necesidad y el cliente debe sentir que se ha creado pensando especialmente en él. De esta manera, estaremos incidiendo de manera directa en la generación de sus emociones.
La digitalización no puede obviar la necesidad con la que cuenta el cliente de recibir atención y ayuda constante. Los canales de atención al cliente que tengamos a su disposición, así como la correcta planificación de nuestras estrategias de marketing, son dos de los ingredientes que nos ayudarán a ser relevantes para nuestra audiencia.
(R)ecompensa
El principal objetivo de cualquier estrategia de retail marketing es invitar a nuestro cliente a que vuelva a nuestro espacio. Es decir, fidelizarlo. Ofrecerle un bono de descuento, obsequiarle con un detalle en cada pedido o idear una fórmula que le permita ser feliz son solamente algunos de los ejemplos que nos ayudarán a conseguir la creación de este vínculo emocional.
(R)educción de costes
El retail digital siempre ha tenido que lidiar con sus estructuras de costes. Tratando de minimizar los mismos con el objetivo de ser lo más competitivos posible. Ofrecer a nuestra audiencia un producto o servicio que resulte competitivo a nivel económico será una de las mejores decisiones por las que podremos optar.
La reducción de costes se engloba dentro de la necesidad de facilitar al máximo cualquier punto del proceso de compra. Ayudando a nuestro negocio a mantenernos en la mente del consumidor durante la mayor cantidad de tiempo posible.
¿En qué áreas se pueden utilizar las 4 R’s del marketing?
- Marketing digital: A través de la monitorización de las opiniones en torno a nuestros productos y servicios. Las estrategias de comunicación y relaciones públicas, por ejemplo, comprenden una gran cantidad de técnicas que se pueden llevar a cabo.
- Marketing social: Las 4 R’s del marketing pueden ayudar a que una comunidad o un grupo de personas adopten un comportamiento en particular. Actuando en nuestro propio beneficio.
- Marketing viral: Con la irrupción de las nuevas tecnologías, el marketing viral se convirtió en una de las áreas del marketing más efectivas. Viralizar nuestro contenido es tan efectivo como económico de llevar a cabo.
- Marketing relacional: A través de las estrategias de fidelización de nuestros clientes.
