La Inteligencia Artificial, así como el resto de tecnologías presentes en nuestro día a día, han ido convirtiéndose en herramientas clave en entornos de muy diversa naturaleza. Históricamente relacionadas con el escenario corporativo, la realidad es que sus aplicaciones están cada vez más presentes en nuestras vidas. Los altavoces inteligentes o los asistentes virtuales de nuestros teléfonos móviles, el mejor ejemplo de ello.
El ámbito cinematográfico, como no podía ser de otro modo, lleva ya una gran cantidad de años vislumbrando cómo será nuestro futuro. Del igual modo que en su momento lo hizo la literatura. Especialmente en nuestra interacción con la Inteligencia Artificial. Por ello, hemos seleccionado cinco títulos que, pese a no ser novedades, no puedes dejar de ver.
2001: Una odisea en el espacio (1968)
Dirigido por Stanley Kubrick, Una odisea en el espacio es uno de los films de ciencia ficción más conocidos a nivel mundial. Además de convertirse en uno de los puntos de partida de la Inteligencia Artificial en este sector. No es casualidad su capacidad para replicar al máximo la manera en cómo interactuamos con la tecnología varias décadas después de haber sido grabado. Y es que para su producción se contó con el asesoramiento de IBM para predecir la manera en cómo el hombre interactuaría con la máquina en un futuro.
Un recorrido a través de diferentes periodos de la historia de la humanidad. Desde sus primeras etapas hasta la irrupción de la realidad tecnológica. Sin duda, uno de los grandes hitos del cine.
Metrópolis (1927)
Tal es la relevancia de Metrópolis que la propia UNESCO consideró a esta película como Memoria del Mundo. Metrópolis hereda el argumento de la novela de The Von Harbou. Además de ser dirigida por Fritz Lang.
En su transcurso, el espectador se enfrenta a un mundo distópico en el que la sociedad se divide en dos grandes grupos: Los ricos y los pobres. La presencia de una mujer robot asume el máximo protagonismo cuando se encuentra conduciendo la revolución obrera. Además, destaca que esta mujer robot fue la primera que apareció en este ámbito. Desde el año 1927, Metrópolis sirvió como el principal eje vertebrador para comenzar a identificar el impacto que la tecnología iba a tener en nuestras vidas… Casi un siglo antes del momento actual.
Yo, Robot (2004)
Yo, Robot ha sido una de las últimas aportaciones del cine al ámbito tecnológico. Concretamente, a lo relacionado con la Inteligencia Artificial. Dirigida por Alex Proyas y protagonizada con el inconfundible Will Smith, nos encontramos ante un escenario distópico asentado en el año 2035. Un contexto en el que los robots inteligentes conviven con los humanos mediante la interiorización de las tres leyes de la robótica.
A medida que pasa el tiempo, los robots comienzan a desarrollarse hacia otra vertiente. Evolucionando y escapándose del control humano. Viki y Sonny, los dos robots protagonistas, comienzan una revolución en la que pretenden terminar con la especie humana.
Durante toda la película surge el mismo debate, ¿es necesario dictar reglas que ayuden a determinar el comportamiento de la Inteligencia Artificial? Si el futuro es como muestra el film, la respuesta parece claro.
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El hombre bicentenario (1999)
Dirigido por Chris Columbus, El Hombre Bicentenario se basa en la historia homónima de Isaac Asimov. Con una trama que se centra en la manera en cómo los avances tecnológicos aterrizan en el ámbito social desde el momento en el que un padre de familia adquiere un robot que ha sido programado para realizar las tareas domésticas. Sin embargo, cuenta con una particularidad con la que nadie contaba: su capacidad para identificar emociones.
A partir de ese momento, se lleva a cabo una reflexión sobre la manera en cómo los robots pueden llegar a comportarse como los humanos en un futuro. Llevando a cabo una exploración en torno a los límites de las emociones y de su propia esencia.
Blade Runner (1982)
Sin duda, no podemos aunar conceptos como Inteligencia Artificial y cine sin mencionar la archiconocida Blade Runner. Una aproximación a la ciencia y a la robótica que no dejó a nadie indiferente desde su presentación a inicios de la década de los 80.
Ridley Scott, su director, ambientó un presente en el que los avances de la ingeniería genética asumirían todo el protagonismo. Los robots, lejos de la apariencia con la que siempre se han relacionado, asumirían un rol en esencia muy similar al de los humanos. Una situación tan real que parece que la duda parece clara… ¿qué elementos nos hacen humanos?